Cuando hablamos de embarazo no planificado, no hablamos solo de una situación médica o biológica. También hablamos de un proceso profundamente emocional, psicológico y vinculado al cuerpo, a la identidad y a la historia personal de cada mujer.

Desde la terapia sexual, abordamos este momento desde un enfoque respetuoso, que considera la dimensión emocional, relacional y corporal del embarazo, sin imponer una visión moral, médica o social.

¿Qué puede generar un embarazo no deseado?

• Confusión profunda: muchas mujeres no saben cómo se sienten exactamente. Pueden experimentar simultáneamente tristeza, alivio, miedo o rabia.
• Desconexión del cuerpo: algunas sienten su cuerpo como un territorio extraño o como si les estuviera pasando “algo que no eligieron”.
• Silencio o culpa: por no poder compartir lo que sienten con su entorno, por temer al juicio o incluso por sentir emociones “incorrectas”.
• Dificultad para tomar decisiones: desde si continuar o no el embarazo, hasta cómo y con quién hablar del tema.

¿Cómo ayuda el acompañamiento terapéutico?

En este tipo de procesos, la contención emocional es clave. La terapia no busca dirigir ni decidir por ti. Busca ayudarte a encontrar tu centro emocional en medio del ruido.
Te ayuda a:

• Nombrar lo que sientes, sin tener que justificarlo.
• Conectar con tu propio deseo, en vez de solo reaccionar a lo que otros opinan.
• Tomar decisiones conscientes, desde un lugar emocional más claro.
• Acompañar el después, cualquiera sea el camino que tomes.

💬 Un espacio cálido, sin juicio

Lo que estás viviendo es importante. Tu historia merece cuidado. Si necesitas hablar, llorar o simplemente estar… puedes escribirme.

Estoy aquí para acompañarte.